por David Wilkerson, martes 1 de diciembre de 2009
Dios usa personas para refrescar a otras personas. El ama tanto este tipo de ministerio que llevó al profeta Malaquías a referirse a ello como la tarea más necesaria en los últimos días. Malaquías describió cómo, en sus días, el pueblo de Dios se edificó el uno al otro a través de la edificación “uno a uno”. “Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero” (Malaquías 3:16).
¿Cuándo, exactamente, sucedió esto? Las palabras de Malaquías vinieron durante un tiempo de impiedad rampante, cuando el “devorador” había destruido gran parte del fruto en la tierra. El pueblo de Dios se había agotado y había empezado a dudar respecto a si valía o no la pena caminar con Dios. Pensaban: “Se nos ha dicho que nos iría bien si servimos al Señor, si obedecíamos su Palabra y llevábamos sus cargas. Pero vemos a los soberbios, a los que no tienen principios, ellos son que aparentemente están felices de verdad. Buscan la prosperidad, viven sin cuidado, disfrutando la vida al máximo”.El Espíritu Santo comenzó a moverse en Israel y pronto llegó el temor de Dios a un pueblo con hambre de Dios. Súbitamente, todos en Israel, jóvenes y viejos, se convirtieron en misioneros de “uno a uno”. Por el despertar del Espíritu, las personas estaban abiertas para con los demás, y así todos edificaban y consolaban a los que los rodeaban.
Estoy convencido de que la palabra de Malaquías sobre este ministerio es un reflejo de los días


Enlace; http://davidwilkersoninspanish.blogspot.com/2009/12/dios-usa-personas.html